Después de abrir y desarrollar correctamente una sesión de formación, ¡es hora de cerrarla como se merece! La fase de cierre es sinónimo de conclusión, es decir, de procurar un desenlace a través del voto, la comparación y la definición de prioridades. Asimismo, permite crear un compromiso y una percepción común para avanzar a la etapa siguiente. La sesión de formación se cerrará correctamente siempre que el/la formador/a defina su objetivo y su alcance. No olvide que la calidad de la fase de cierre está íntimamente ligada a la de las fases de apertura y exploración. Si se enfrenta a alguna dificultad al término de la sesión, retroceda en el hilo de su programa y observe las etapas anteriores.
Priorizar las acciones con «La prueba de los cien dólares»
Juego muy conocido y siempre eficaz, «La prueba de los cien dólares» permite a los participantes establecer prioridades entre las ideas y las soluciones desarrolladas durante las sesiones.
- Duración del juego: variable en función del número de participantes, pero puede extenderse hasta 90 minutos
- Número de participantes: ilimitado, aunque dividido en grupos de tres a cinco personas
- Materiales: rotuladores, encerado y papel
Desarrollo del juego:
- Divida el encerado en tres columnas: «Elemento», «Precio» y «Explicación». Anote en la columna de la izquierda las cuestiones, las ideas y las soluciones que se hayan trabajado o que hayan surgido durante las sesiones de exploración.
- Presente el juego a los alumnos: cada grupo dispone de 100 dólares imaginarios para gastar. Juntos, los participantes deben distribuir esta cantidad entre todos los elementos. Y, cuando asignen un importe, deberán justificarlo en la columna de la derecha. Este valor no dependerá del coste real del elemento, sino de la importancia que se le otorgue.
- Confronte los resultados entre los equipos y permita que los participantes expliquen su razonamiento. Puede cumplimentar una tabla con las medias o crear una tabla por grupo.
La disponibilidad de un presupuesto permite materializar la implicación y la determinación de prioridades por parte de los participantes. De este modo, sabrá sobre qué puntos podrán trabajar realmente en el futuro.
Cuantificar los desafíos con la «Matriz de impacto y esfuerzo»
Al evaluar las acciones y sus consecuencias, los alumnos sabrán mejor a qué dedicar su energía en sus futuras tareas.
- Duración del juego: de treinta minutos a una hora
- Número de jugadores: ilimitado, pero es más eficaz en grupos pequeños
- Materiales: pósits y rotuladores
Desarrollo del juego:
- Enumere una serie de acciones para realizar o realizables después de la formación: «llevar a cabo una negociación», «redactar un comunicado de prensa», «presentar un nuevo servicio», etc. Escríbalas todas en un lugar visible para todos.
- Presente la primera acción según su finalidad. Pregunte: ¿Qué debemos hacer?» o «¿Qué necesitamos?». A continuación, concéntrese en los esfuerzos: «¿Qué elementos necesitamos para alcanzar nuestra meta?».
- Invite a los participantes a anotar sus respuestas individualmente en un pósit.
- Pegue las respuestas delante de cada acción. En la primera columna, se incluirán los impactos y, en la segunda, los esfuerzos. Una vez que se hayan colocado todos los pósits en la pared, invite a los alumnos a compartir su punto de vista y debatir en grupo. Los pósits podrán cambiarse de ubicación durante el debate.
- Una vez que se hayan analizado todas las iniciativas, se tendrá una idea más clara de las acciones más y menos rentables.
Por medio de esta matriz, los alumnos pueden definir las iniciativas que deben valorarse, los objetivos para alcanzar y los esfuerzos necesarios para lograrlo. De este modo, podrán priorizar las tareas y sabrán cuáles iniciar en las semanas siguientes.
Analizar una situación vigente con «Empezar, parar, seguir»
Gracias a su formación, los participantes tendrán una visión más clara de la situación en que se encuentran y los objetivos que podrán alcanzar en adelante. De este modo, no solo adquirirán una nueva perspectiva acerca de las buenas y malas prácticas de su departamento o su empresa, sino que serán capaces de poner en práctica un espíritu crítico. Apóyese en esta nueva perspectiva para ayudarles a cambiar sus hábitos.
- Duración del juego: de diez a sesenta minutos
- Número de participantes: entre una y diez personas
- Materiales: encerado o rotafolio, rotuladores, papel
Desarrollo del juego:
- Dibuje un cuadro en un encerado o un rotafolio. Este cuadro debe constar de tres columnas: «Empezar» a la izquierda, «Parar» en el centro y «Seguir» a la derecha.
- Presente el juego a los participantes: cada persona debe enumerar situaciones o metas relacionadas con la formación a las que se enfrenta en su trabajo. Los elementos deben ser actuales y reflejar sus vivencias. Por ejemplo, puede escribir «redacción de actas de reuniones», «impartición de seminarios» o «creación de boletines de noticias».
- Pida a los alumnos que distribuyan las situaciones o las metas en las tres columnas. Deje tiempo para que reflexionen y sitúen los elementos de forma correcta y realista.
- Invite a cada participante a compartir sus resultados. A pesar de que el debate será más concluyente si los participantes son empleados de la misma empresa, el juego también funcionará en las formaciones interempresa.
Auténtico juego de cierre, «Empezar, parar, seguir» permite analizar una situación desde una nueva óptica, además de definir las siguientes acciones y dejar de lado aquello que no resulta útil.
Generar comentarios constructivos con «Más/Delta»
Más que una simple lista de aspectos positivos/negativos, este juego permite echar una mirada amable a las acciones y reflexionar sobre los puntos de mejora. Materializa los objetivos y los esfuerzos. Esta sesión es específica para grupos intraempresa.
- Duración del juego: de diez a cuarenta y cinco minutos
- Número de participantes: ilimitado
- Materiales: encerado o rotafolio, rotuladores, papel
Desarrollo del juego:
- Divida el encerado o el rotafolio en dos columnas. La primera deberá ir encabezada por el signo «+» y la segunda por el signo Delta «Δ».
- Proponga a los participantes que reflexionen acerca de los aspectos positivos de una actividad e introduzca las respuestas en la columna de la izquierda.
- Invítelos a continuación a enumerar en sus papeles los aspectos repetitivos, negativos o restrictivos de dicha actividad. En lugar de detenerse en esta etapa, los alumnos deben reflexionar acerca de los diferentes medios para mejorar la actividad, su desarrollo o sus condiciones. Estas últimas respuestas deben indicarse en la columna de la derecha.
- Repita esta operación para cada una de las actividades indicadas.
De este modo, obtendrá comentarios verdaderamente constructivos y podrá considerar vías de mejora provenientes de quienes construyen el negocio. A su vez, los participantes se marcharán con nuevas ideas que querrán polinizar dentro de sus propias empresas.
Todos estos juegos favorecen el cierre de la sesión y permiten capitalizar los conocimientos adquiridos. Además, refuerzan los aprendizajes y los confrontan con la realidad de los alumnos. Al mismo tiempo, puede medir su nivel de comprensión y su voluntad para emplear aquello que han aprendido.
Gracias a estos artículos, ahora dispone de todas las herramientas necesarias para apropiarse de estos juegos y crear una formación interactiva. Como siempre, le recomendamos probar estos enfoques, trabajarlos y modificarlos para que se adapten a sus necesidades. Asimismo, asegúrese de adaptarlos en función de las situaciones y el público. ¡Solo así se sentirá más a gusto y eficiente!
